La red Alfa Inmobiliaria prevé que este año se repetirá el patrón tradicional en el mundo de la compraventa, que señala el último trimestre del año como el más activo en operaciones.
Si bien es cierto que “Se mantiene el desequilibrio entre oferta y demanda según las distintas comunidades autónomas de las que hablemos” afirma Jesús Duque, vicepresidente de la compañía, la realidad es que a partir del mes de septiembre el incremento en el número de operaciones ronda el 5%”.
Y esto ocurre, según confirma este directivo, tanto en viviendas, como en locales comerciales, oficinas e incluso garajes. Eso si, esta homogeneidad no se mantiene según las zona geográficas.
La Comunidad de Madrid, así como en las provincias de Málaga y Valencia es donde más operaciones han cerrado, y prevén cerrar, la compañía entre los meses de septiembre y diciembre. Le siguen Sevilla, Barcelona, Alicante y Zaragoza. “En conjunto, las operaciones se han disparado en aquellas regiones con mayor actividad empresarial y más atractivas para desarrollar el tipo de trabajo híbrido que se está imponiendo, y que combina presencia física en las oficinas con teletrabajo en el domicilio”, añade.
Las razones que justifican este patrón
Los motivos que explican que este cuatrimestre se dispare el número de operaciones de compraventa son los siguientes, a juicio del máximo responsable de Alfa Inmobiliaria:
Valor refugio
La vivienda ha vuelto de recuperarse como valor refugio. “En España la vivienda ha sido tradicionalmente nuestra forma de ahorro. Muchas familias, totalmente alejadas de la idea de invertir, se sienten muy interesadas por la idea de adquirir una vivienda y beneficiarse de su uso y revalorización a largo plazo. Y ahora más, teniendo en cuenta la escasez de opciones en las que invertir, y las dudas existentes sobre el futuro de las pensiones” afirma Duque. De hecho, los inmuebles suponen en España entre el 80% y el 98% de la riqueza de las familias.
La obra nueva da una segunda oportunidad a la vivienda de segunda mano
Si bien la vivienda usada es el motor del mercado, la creciente oferta de obra nueva está llevando a muchos compradores, que no pueden permitirse esta opción, a considerar la oportunidad de adquirir una vivienda de segunda mano, siempre y cuando esta goce de otro tipo de ventajas, como son una buena ubicación, una buena conservación o el hecho de contar con todas las infraestructuras necesarias.
Entidades financieras más flexibles
Al llegar el final del ejercicio las entidades financieras suelen ser más flexibles en la concesión de hipotecas. Este hecho, anima a muchos compradores a forzar las operaciones en este periodo del año. Este hecho se ha sumado en los últimos años a la bajada de tipos de interés, con el Euríbor bajo mínimos.
Efecto cambio de año
No es una cuestión meramente emocional. El cambio de año tiene importantes consecuencias económicas a nivel fiscal, por lo que son muchos los compradores que, viendo el final del ejercicio, optan por acelerar la operación con el objetivo de beneficiarse de las normas vigentes.
“Aunque la situación del mercado inmobiliario no se ha recuperado por completo de la pandemia y aún es pronto para lanzar mensajes muy optimistas, afirma el directivo de Alfa Inmobiliaria, todo apunta a que este trimestre será decisivo para el sector, y que en el primer ejercicio de 2022 comenzaremos a ver las tendencias reales en lo que respecta a vivienda de segunda mano”.