Nos centramos mucho en dar la mejor imagen de nosotros mismos en nuestras redes sociales. Sin embargo, existen muchos detalles que olvidamos y que son necesarios para potenciar nuestra marca personal. Y es que, como decía un jefe mío: todo empieza antes. Pero ¿cómo diferenciarse desde el principio para potenciar nuestra marca personal?
No solo fotos y vídeos
Nos esforzamos en tener el mejor perfil, cuidamos al máximo las fotografías de nuestras redes, subimos contenido que habla de nuestra mejor cara, tanto personal pero profesional, pero ¿se refleja todo ello en nuestro servicio?
La marca personal es la imagen que perciben de nosotros nuestros contactos y clientes tras cualquier impacto, conversación o reunión entre ellos y nosotros. Es decir, es el poso que hemos dejado en compradores, propietarios o inquilinos cuando ha finalizado un determinado contacto.
De ahí que, por mucho que nos volquemos en dar esa mejor cara de nosotros mismos en determinados medios, de nada servirá si el servicio profesional que hemos ofrecido no ha marcado la diferencia.
No guardar información
Lo primero que debemos tener en cuenta es que todos nuestros contactos y clientes quieren la mejor información. Es probable que publiquemos viviendas muy interesantes y vistosas en portales inmobiliarios como Fotocasa o habitaclia. Subimos unos reportajes fotográficos maravillosos y muy cuidados y en ocasiones con vídeo de la vivienda donde mostramos lo mejor del inmueble. Sin embargo, cuando llega el momento de redactar una descripción de la propiedad, muchas veces nos quedamos cortos o damos más información de los servicios que ofrecemos que de la vivienda en sí.
Claro, muy pocas personas se detienen en la descripción o nadie lee. ¿Y aquellos que leen? ¿Y los clientes que necesitan información más detallada? ¿Y si no tiene ascensor? ¿No lo deberíamos indicar?
Y es que, si apostamos por la seriedad, la honestidad y la transparencia como valores que se integran en nuestra marca personal es algo que debe identificarse en todas nuestras comunicaciones. Sean publicitarias o no.
Contestar siempre a todas las solicitudes
Otro detalle que debemos cuidar los profesionales inmobiliarios es la respuesta a las solicitudes de información. Y es que muchas personas no disponemos de tiempo para detenernos y ver viviendas a través de internet y utilizamos nuestros momentos de descanso para hacerlo. Esto es algo que se puede analizar viendo los horarios en los que recibimos más solicitudes de potenciales compradores interesándose por alguna de las viviendas que tenemos en cartera. Normalmente, se suelen recibir más peticiones entre las 20h y la 1h de la mañana.
De ahí que muchos elijan las solicitudes de información por escrito para interesarse por un determinado inmueble. El problema fundamental reside en el porcentaje de respuesta. Y es que es probable que más del 50% estas solicitudes, no se respondan. Por tanto, todo el esfuerzo que hemos realizado en plataformas, redes sociales u otros medios, han sido en vano por la imagen que percibe el comprador al no recibir ninguna respuesta.
Y es verdad que cuando respondemos a los clientes por este medio, muchos de ellos no nos contestan. Pero ¿todos los clientes que acuden físicamente a nuestra agencia compran finalmente una vivienda con nosotros? ¿Los compradores que realizan una visita comprarán con nosotros en un futuro cercano? Seguramente no. Sin embargo, nuestra misión es ofrecerle el mejor servicio posible y que sepan que están hablando con un profesional que cuida y se preocupa por sus clientes.
Buscar la mejor solución
Para construir una buena marca personal, debemos encontrar la mejor solución para ellos. Por tanto, debemos buscar momentos en los que podamos tener una conversación y obtengamos toda la información necesaria para poder realizar un buen trabajo.
Y es que, aunque muchos compradores no quieran comprometerse con nosotros desde el inicio, otros muchos terminan cambiando de opinión y se dejan aconsejar por un asesor inmobiliario que los ha escuchado, ha cubierto necesidades y ha superado sus expectativas, sorprendiéndoles gratamente.
Este es nuestro objetivo: ofrecer un servicio de calidad y que marque la diferencia. Por eso debemos estar al día de avances y ofrecer la mayor comodidad a nuestros clientes. Así que ofrezcamos servicios innovadores y hagamos la vida más cómoda a aquellos que nos han dedicado, aunque sea un minuto, a interesarse por algo de lo que podemos ofrecerle.
Si estos momentos que vivimos nos ha traído algo positivo, es a perderle el miedo a desarrollos digitales y a los cambios tecnológicos. Hoy en día, un cliente que se interesa por una vivienda puede ver ese inmueble acompañado en la distancia y siendo orientado por la presencia virtual de un profesional gracias a tecnologías como la Visita Express.
Y si, además, hablamos de clientes internacionales o viviendas de segunda residencia, aún es más importante ofrecer esta posibilidad. Somos capaces de filtrar a nuestros compradores y realizar una selección de viviendas acordes con sus expectativas. Así, cuando puedan desplazarse y visitar las propiedades, la probabilidad de que una de las seleccionadas sea la definitiva, es mucho mayor.
El adaptarnos y proporcionar estos servicios innovadores a nuestros clientes que les facilite y les haga más cómoda la gestión, sin duda influirá en la imagen que tendrán de nosotros. Algo que marcará totalmente la diferencia y que impacta directamente en nuestra marca personal.