El mercado inmobiliario español arrastra desde hace años un importante desequilibrio entre la oferta y la demanda de compra, pero en 2025 esta brecha se ha acentuado aún más. La distancia entre el elevado número de personas interesadas en comprar vivienda y el reducido volumen de propietarios dispuestos a vender continúa ampliándose.
Según los últimos datos, el 81 % de los participantes en el mercado son compradores o aspirantes a serlo, mientras que sólo un 12 % declara tener intención de vender. Además, un 7 % adicional afirma estar presente en ambos lados del mercado, ya que quiere vender para poder comprar otra vivienda. Esta es una de las conclusiones del informe es una de las principales conclusiones del informe “Radiografía del mercado de la vivienda en el primer semestre de 2025”, elaborado por Fotocasa Research.
8 de cada 10 ciudadanos quieren comprar y sólo 1 de cada 10 pone a la venta su casa
“Tensión máxima en el mercado inmobiliario, puesto que aumenta el interés por comprar vivienda: 8 de cada 10 ciudadanos quieren comprar, pero sólo 1 de cada 10 pone su casa a la venta. Desde la pandemia, el mercado residencial viene registrando un interés muy intenso por la compra de vivienda, una tendencia que se ha intensificado en los últimos años debido a varios factores como las ofertas hipotecarias más competitivas, el peso creciente de los inversores y compradores extranjeros, y las medidas de estímulo impulsadas por la administración dirigidas a jóvenes y familias con menores a cargo. A esto se suma el crecimiento poblacional derivado de los flujos migratorios, que refuerza aún más la presión sobre la demanda. Mientras, la intensidad de la compraventa reduce progresivamente la vivienda disponible en el mercado, ya que la oferta no crece al mismo ritmo que la demanda, alimentando el desequilibrio estructural que vive actualmente el mercado”, comenta María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.
La distribución actual del mercado de compraventa, con un 81 % de demandantes frente a sólo un 12 % de ofertantes, refleja una brecha que no deja de ampliarse. En 2024, el desequilibrio era ya notable —78 % frente a 15 %—, pero en solo un año la proporción de compradores ha aumentado tres puntos, mientras que la de vendedores se ha reducido en la misma medida. Esta evolución confirma que la tensión entre oferta y demanda sigue creciendo en el mercado residencial.
Sólo un 1% de propietarios no ha conseguido vender su casa en el último año
Si estos datos se trasladan al global de la población española mayor de 18 años se observa que en el último año un 13% de españoles ha comprado o está intentando comprar vivienda frente al 3% de propietarios españoles que vende o está intentando vender.
En este segundo grupo resulta especialmente interesante cómo sigue reduciéndose, de forma lenta pero constante, el porcentaje de particulares que han intentado vender un inmueble, pero no lo han conseguido: ya son únicamente un 1%, cuando lo habitual antes de la pandemia era que superase el 4%. Este reducido porcentaje de propietarios que no han vendido (1%) demuestra el gran dinamismo que existe en el mercado de compraventa español en estos momentos.