Entrevistamos a Carlos Olmos, fundador y director de Urban Data Analytics, para hablar sobre la aplicación del Big Data en el sector inmobiliario, haciendo un repaso por los principales retos del sector en el uso de los grandes volúmenes de datos. Además, nuestro experto explica que teniendo en cuenta el potencial del Big Data, se podría haber minimizado el impacto brutal de la crisis. Finalmente, Carlos nos da las claves para que las pequeñas agencias inmobiliarias saquen el máximo partido al uso del Big Data.
El sector debe de afrontar un cambio de mentalidad para aumentar la transparencia y así favorecer al mercado inmobiliario. Según Carlos Olmos, es necesario una mayor transparencia en el sector, ya que ofrecer más información provoca mayores volúmenes de transacción, y, por tanto, mayor rentabilidad y menor riesgo.
¿Podría el Big Data haber evitado la crisis inmobiliaria?
Si hubiéramos podido prever el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, las cosas podrían haber sido distintas. Tal y como nos cuenta Carlos, el uso del Big Data podría haber minimizado en algo el impacto de la crisis, ya que el Big Data permite anticiparse a los síntomas y predecir el agotamiento de demanda.
Por otro lado, el Big Data permite tener un conocimiento segmentado y microlocalizado de la oferta y la demanda, con lo que puede predecir agotamientos de ciertas tipologías en determinadas zonas.
Pequeñas agencias inmobiliarias: Cómo aprovechar el Big Data
El Big Data no sólo es cosa de las grandes agencias inmobiliarias, las pequeñas agencias pueden aprovechar el potencial del Big Data para explotar mejor sus recursos.
El Big Data ayuda a las pequeñas agencias a focalizar sus recursos en aquellos activos que son más rentables. Tal y como explica Carlos, en cuanto a la comercialización, las pequeñas agencias pueden focalizar sus recursos en los pisos que tienen tiempos de ventas menores y un precio acorde con el mercado. Por otro lado, en cuanto a la captación, el Big Data les permite focalizar sus recursos en los activos e inmuebles más demandados por sus clientes.
Además, Olmos explica que el Big Data posibilita a las pequeñas agencias trasladarse a otras geografías y ámbitos con gran demanda y poca competencia, con lo que les ayuda a aprovechar al máximo todas las oportunidades de mercado.
En conclusión, el Big Data aporta un gran valor a las pequeñas agencias, ya que multiplica sus recursos focalizándolos en aquellos activos más rentables para la empresa.