La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) detectó en enero una ligera mejora en los indicadores del sector inmobiliario y de la construcción respecto a los que se venían registrando desde el inicio de la crisis sanitaria.
El Índice Inmobiliario Mensual de OCU, elaborado a partir de una selección de indicadores oficiales y de los precios de venta y alquiler en 250 barrios de las principales ciudades del país, pasó en el primer mes del año de 51 a 76 puntos en una escala que va de 0 a 200.
En este contexto, el consumo de cemento pasó de crecer un 3,8% en noviembre a un 8,2% en diciembre; los visados de viviendas, de caer un 22,9% en octubre a crecer un 8,2% en noviembre; los visados de reforma; de 2.841 en noviembre de 2019 a 2.988 en noviembre de 2020; o el índice de actividad de construcción, de ceder un -16 en diciembre a un -9,9 en enero.
En el último informe del Ministerio de Industria también se detectó una mejora del sector de obra civil, que en enero cayó 2,6 puntos, frente a los 34,3 que caía en diciembre, o en las actividades especializadas de la construcción, que aumentaron en 16,6 puntos en el último mes.
No obstante, pese a subir a 76 puntos el índice de la OCU, la organización considera que valores superiores a 100 indican unas perspectivas positivas para la construcción en España. Por ello, a pesar de la subida, el índice sigue estando en terreno negativo.
Por lo tanto, a la vista de los datos de coyuntura y de las perspectivas de reducción de ingresos para los hogares, la OCU prevé mayores bajadas en el precio de la vivienda, por lo que su consejo sigue siendo el de actuar “con prudencia”.