El Índice Registral de Actividad Inmobiliaria (IRAI) mostró un descenso anual del 4,7% entre abril y junio y una caída intertrimestral del 3,1% en el mismo período, según los datos ofrecidos por el Colegio de Registradores.

Por su parte, el IRAI suavizado bajó en un 1,2% entre trimestres, por lo que ambos enfoques suponen un escenario distinto al registrado durante los últimos años, en los que ha predominado la senda alcista.

Así, estos resultados dan continuidad a la tendencia descendente iniciada en la segunda mitad de 2022 y muestran que se produce “una significativa desaceleración” de la actividad después de una ligera recuperación en el trimestre anterior, aunque venía precedida de dos trimestres consecutivos de caídas moderadas, como han señalado en una nota de prensa.

Esta evolución trimestral negativa del IRAI se produjo, en mayor medida, por el área de propiedad, que disminuyó el 3,7%, motivado por una significativa caída del 14,5% en el número de hipotecas.

Por su parte, el área mercantil también cayó un 1,3%, con un descenso del 1,5% en el sector de la construcción.

En cuanto a los datos anuales absolutos, el descenso en el área de propiedad fue del 6,6%, con una disminución significativa en el número de hipotecas (-19,9%).

Asimismo, destacó también la bajada del precio de las compraventas (-3,7%) y en el número de compraventas (-5,8%).

En el área de las sociedades mercantiles, se produjo un ligero incremento del 1,0%, principalmente, debido a un aumento del 1,3% en el sector de la construcción.