El mercado español de operaciones corporativas inmobiliarias registró en 2019 hasta 37 operaciones por un total de 1.500 millones de euros en inmuebles de los segmentos retail, oficinas, logística, sanitario y alternativos. Esto sitúa al país como el cuarto mercado europeo por volumen de transacciones.
Así se desprende del informe ‘Raising Capital from Corporate Real Estate’, publicado por la consultora inmobiliaria internacional JLL. Este concluye que las oficinas y los espacios industriales, logísticos y de retail siguieron siendo los segmentos inmobiliarios más activos en cuanto a transacciones.
En concreto, el retail contabilizó el mayor volumen de ventas corporativas en 2019, con unos 515 millones de euros en nueve operaciones (un 34% del total). Seguido de oficinas, con unos 395 millones en ocho operaciones (26%). Logística, con 342 millones en once operaciones (23%). Sanidad, con unos 220 millones en ocho operaciones (14%). Y alternativos, con unos 25 millones (1%).
El informe destaca las operaciones de las ventas de los locales comerciales del Edificio España por parte de RIU y la venta de El Corte Inglés de Francesc Maciá en Barcelona, ambas en el entorno de 150 millones. También la operación de Torre Telefónica (Diagonal 00, Barcelona) y Plaza Catalunya 16 en Barcelona, ambas por más de 100 millones. Por último, también la venta de los activos de Amazon Barcelona Airport, por más de 70 millones.
Operaciones corporativas inmobiliarias: nuevas fuentes de liquidez ante la COVID-19
El incremento de la incertidumbre derivada de la pandemia por la COVID-19 está llevando a destacados propietarios e inquilinos corporativos a buscar activamente nuevas fuentes de liquidez. También una mayor flexibilidad en sus carteras inmobiliarias, a medida que crece el interés de los inversores por los activos inmobiliarios que generan rentas estables.
En este sentido, el informe de JLL revela que el interés por las oportunidades de venta o compraventa con posterior arrendamiento seguirá creciendo durante este año tras alcanzar su zenit en 2019. Entonces las ventas de activos inmobiliarios corporativos aumentaron en 23.100 millones de euros. Se relizaron más de 460 operaciones únicamente en Europa, Oriente Medio y África (EMEA).
La consultora también concluye que las oficinas y los espacios industriales, logísticos y de retail siguieron siendo los segmentos inmobiliarios más activos en cuanto a transacciones inmobiliarias corporativas en 2019. De hecho, representaron el 76% del valor total de estas operaciones en la región EMEA, con una tendencia creciente de venta de los activos como carteras y no de forma individual.
En el contexto actual, los propietarios e inquilinos corporativos aprecian cada vez más la opción de utilizar sus activos inmobiliarios como herramientas estratégicas para liberar liquidez y maximizar su capital circulante.
“Hemos empezado a observar un mayor número de empresas que preparan sus activos para venderlos. Y cabría esperar que esta actividad sea más prominente en el segundo semestre del año, a medida que los mercados vuelvan a la normalidad”, concluye el director del negocio de inversores de JLL, Sergio Fernandes.