El sector de la construcción espera un crecimiento neto de la nueva obra residencial del 49% en 2022 y confía en que esta tendencia se replique en los proyectos de edificación no residencial, un 20%, y de obra civil, un 14%, según los proyecciones del ‘Informe diagnóstico de la Construcción del cuarto trimestre del año’, elaborado por el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España (Cgate) y la Royal Institution of Chartered Surveyors (Rics).
Las buenas perspectivas del sector se basan en los datos registrados a lo largo de los últimos tres meses de 2021 y, también, en la llegada de los fondos europeos en 2022.
El presidente de Cgate, Alfredo Sanz, espera que las ayudas europeas supongan, además, “un fuerte repunte para el sector de la rehabilitación” y sirvan para actualizar y descarbonizar el parque edificado.
A pesar de las buenas expectativas para los próximos meses, la construcción se expone a una disminución del 13% en los márgenes de beneficio. El 86% de los encuestados señaló el encarecimiento de los materiales de construcción como el principal freno del sector. De hecho, se espera que los precios suban un 8,84%, según la encuesta.
Para un 82%, el primer obstáculo es la falta de mano de obra cualificada.
Terry Parsons, economista de Rics, por su parte, comenta que los retos significativos en torno a los costes de los materiales y la disponibilidad de mano de obra habilitada “podrían pesar cada vez más en la actividad si siguen empeorando”.