El Banco de España ha apreciado una cierta estabilización en el tipo de interés en los préstamos hipotecarios a tipo fijo durante el año 2021 y el inicio del 2022, tras la tendencia descendente de los ejercicios 2019 y 2020.
El euríbor entró en terreno negativo en febrero de 2016 por la política ultraexpansiva del Banco Central Europeo (BCE) para apuntalar la recuperación en la zona euro, lo que desencadenó una batalla hipotecaria entre las entidades, que han estado apostando por el tipo fijo en los últimos años. Ello ha favorecido que los consumidores más conservadores no tengan que asumir la volatilidad derivada del riesgo de tipo de interés asociado a los variables, al tiempo que se han podido beneficiar de unos precios muy competitivos, los más bajos de la seria histórica. Así, en los últimos años las hipotecas a tipo fijo han ido ganando peso, representando en 2021 alrededor del 70% de las nuevas hipotecas sobre vivienda concedidas.
Desde que comenzó el año 2022, el Euríbor ha repuntado hasta cerrar el mes de abril en positivo por primera vez en seis años, aupado por el cambio de discurso del BCE y la expectativa de una subida de tipos de interés este año. En este escenario, los principales ejecutivos de las entidades financieras han reconocido que reajustarán su oferta hipotecaria, mejorando su propuesta para el tipo variable y encareciendo ligeramente el tipo fijo.
Ante estos cambios, que ya pueden apreciarse en el portfolio hipotecario de algunas entidades, la Asociación Hipotecaria Española ha vaticinado que las operaciones a tipo variable cobrarán de nuevo impulso.
Los bancos envían trimestralmente al Banco de España información individualizada sobre los tipos de interés y las comisiones habitualmente aplicadas a determinados productos bancarios, como son las hipotecas. En el Portal del Cliente Bancario, el supervisor ha publicado la evolución trimestral de los datos medios de los últimos tres años, tanto del tipo de interés nominal anual aplicado como de la TAE del conjunto entidades para los préstamos hipotecarios a tipo fijo.
La TAE media de las hipotecas a tipo fijo cayó más de un punto entre marzo de 2019 y marzo de 2022, pasando del 3,32% al 2,34%. Analizando la evolución trimestre a trimestre, los descensos fueron más pronunciados a lo largo de 2019, cuando cerró en el 2,81%, y 2020, en el 2,54%, mientras que desde el 2,37% marcado en marzo de 2021 se produjo una ralentización de la caída.
De hecho, en el primer trimestre de 2022 la TAE media de los préstamos a tipo fijo fue del 2,34%, el mismo nivel que en el trimestre precedente. Estos datos revelan que, con datos de marzo, todavía no es visible el efecto de un encarecimiento de los préstamos a tipo fijo, aunque el Banco de España ha constatado en su publicación que “se aprecia una cierta estabilización de los tipos durante el año 2021 y comienzo de 2022”.