“Nuestro marketing va a enfocado a las personas, a mostrarnos tal y como somos. Intentamos despojarnos de la imagen equivocada que algunos tienen de las inmobiliarias”.
La crisis económica ha acelerado la necesidad de que las empresas en general y las agencias inmobiliarias en particular, tengamos que adaptarnos a un entorno cambiante y muy competitivo. En nuestro caso hace unos años que apostamos por dar un giro en la estrategia de comercialización de las viviendas, el mercado demandaba una atención mucho más personalizada y ágil.
La situación nos obligó a desarrollar e implementar métodos operativos creados específicamente para la atención de cada tipo de cliente, ya sea comprador, vendedor, arrendador o arrendatario. Cada método incluye una serie de procedimientos y sistemas que nos permiten anticipar los problemas que pueden llegar a surgir durante el proceso de compra, lo que hace que esa experiencia sea positiva.
Hemos incorporado herramientas tecnológicas como nuestro software de gestión o CRM, que nos permite ser más productivos. Posteriormente introducimos nuevos servicios de valor añadido (home staging, vídeo profesional, etc.), de esta manera, hemos potenciado el trabajo en exclusiva, desarrollando planes de marketing individualizados para cada inmueble y hemos contribuido al impulso de la MLS local, con el único fin de dar un mejor servicio a nuestros clientes.
Las agencias hemos entendido la importancia del marketing, ya no solo en la comercialización de una vivienda, sino como vehículo para posicionar nuestra marca en nuestro barrio y llevar nuestro mensaje a los potenciales clientes. El objetivo es estar posicionados en la mente de estos clientes, de nuestros vecinos, de nuestro círculo, incluso antes de que ellos nos necesiten, para que cuando tengan la necesidad de realizar cualquier operación inmobiliaria, piensen en nosotros como primera opción, obteniendo así una ventaja competitiva.
Nuestro marketing va a enfocado a las personas, a mostrarnos tal y como somos, intentamos despojarnos de la imagen equivocada que algunos tienen de las inmobiliarias, de enseñar que trabajamos para ellas. Es en este punto donde entran en juego las diferentes redes sociales que utilizamos, y que nos permiten interactuar con nuestros clientes.
Una de las iniciativas de marketing que mejor resultado nos ha dado este año y con la que conseguimos trabajar muchos de los conceptos que queremos aplicar, es el Street Marketing o Marketing de Guerrilla. Esta iniciativa es precisamente la que nos ha llevado a conseguir el premio de marketing en Inmociónate 2017, el mayor evento para inmobiliarias que cada año se celebra en España, un reconocimiento que nos hace especial ilusión porque es concedido por nuestros propios compañeros de profesión.
Street Marketing es un conjunto de acciones estratégicas que emplea técnicas publicitarias poco convencionales. La idea es hacer cosas que otros no hacen buscando sorprender al propio consumidor, el cual no considera estas acciones de Street Marketing como publicidad, simplemente disfruta de ellas. Se desarrolla en las calles y requiere de una mínima inversión. A través de esta estrategia se persigue la máxima difusión mediática.
El éxito de la campaña radica en provocar que la gente la comparta, que hablen con otros de ella y que finalmente le den esa publicidad gratuita que cualquier marca desea. Estos eventos que llevamos a la calle tienen tres fases:
- Primera, en la que hacemos partícipes a nuestros clientes, amigos y comercios de la zona de influencia.
- Segunda, se realiza el mismo día del evento, a pie de calle, interactuando con la gente del barrio, relacionándonos de tú a tú con las personas que disfrutan de la actividad.
- Tercera y última, con la realización de un vídeo mostrando todo el proceso de principio a fin de la acción, y que difundimos de forma masiva a todo nuestro círculo ya sea a través de las redes sociales o email marketing.
Hemos comprobado que, invirtiendo poco dinero y poco tiempo en la preparación y desarrollo de las distintas acciones, pero derrochando creatividad, se consiguen resultados espectaculares. Nos hemos posicionado en la mente de nuestros clientes, estamos presentes con mensajes positivos, con actividades solidarias y ayudando a personas. Los inmobiliarios somos cercanos, somos de carne y hueso, y tenemos un compromiso con nuestra sociedad.
Para comprar, vender o alquilar un inmueble es imprescindible que se establezca una relación de confianza entre agente y cliente. Esa relación se forja con el tiempo y además estas personas la pueden transmitir a sus familiares y amigos. Por este motivo es muy importante mantener el contacto con el cliente, ese es el gran reto que tenemos por delante las agencias inmobiliarias en los próximos años.
Debemos ser capaces de establecer un vínculo permanente que nos permita realizar la primera transacción con el cliente y además generar repetición, esa sería la mejor expresión de afecto que nos pueden demostrar.
La fidelización solo se consigue aportando un valor diferencial. Estamos obligados a mejorar nuestra capacidad de escuchar, observar y conversar. Solo poniendo al cliente en el centro de nuestro negocio conseguiremos que él mismo busque el contacto, que quiera repetir gracias a nuestras acciones y buenas prácticas. En todo esto, el marketing es una pieza fundamental en esta nueva estrategia de comunicación.