El crecimiento de la actividad del sector privado de España se ralentizó en mayo a su nivel más bajo de los últimos cinco años y medio, según refleja el índice compuesto de gerentes de compras (PMI), que bajó a 52,1 puntos desde los 52,9 de abril, según informó IHS Markit, que atribuyó parcialmente esta desaceleración a la incertidumbre política en el país.
“Dicha desaceleración estuvo vinculada con la inestabilidad política en el país tras las recientes elecciones, que ha afectado la demanda interna, además de una continua atenuación de las ventas en el extranjero debido a que las tensiones comerciales están lastrando la actividad económica mundial”, indicó Paul Smith, economista de IHS Markit.
En el caso del sector manufacturero español, la actividad rozó el estancamiento en el mes de mayo, situando el índice PMI correspondiente en 50,1 puntos, frente a los 51,8 de abril, mientras que en el sector servicios el dato retrocedió a 52,8 puntos desde los 53,1 del mes anterior, su peor lectura desde septiembre de 2018.
“El crecimiento económico español se tambaleó a mediados del segundo trimestre, ya que la producción manufacturera se estancó y el crecimiento del sector servicios se ralentizó debido a unos aumentos más lentos de los nuevos pedidos”, apuntó Smith, advirtiendo de que el índice PMI sugiere un crecimiento más lento del PIB de España para el segundo trimestre en su conjunto.
El bajo rendimiento del sector manufacturero se vinculó con una caída de los nuevos pedidos por segunda vez en los últimos cuatro meses, señalaron los autores de la encuesta, mientras que en el sector servicios los nuevos pedidos aumentaron, aunque lo hicieron al ritmo más débil desde septiembre de 2013.
“Hubo informes procedentes de ambos sectores de que la incertidumbre política, tras las recientes elecciones, debilitó las ventas en mayo. La preocupación sobre la coyuntura política también afectó las perspectivas”, añadieron.
Por su parte, el empleo del sector manufacturero cayó en mayo por primera vez desde finales de 2013, pero como el sector servicios continuó contratando personal, el ritmo de crecimiento del empleo en conjunto se mantuvo.