El precio de la vivienda crecerá un 5,5% este año, un 4,4% en 2020 y el incremento descenderá hasta el 3,9% en 2021, según previsiones de S&P.
La agencia de calificación ha señalado que durante el primer trimestre los precios aumentaron un 6,9%, cifra que está por encima de la registrada en 2018 (6,7%), pero por debajo de la de 2017 (7,2%).
Asimismo, ha señalado que la economía española está resistiendo la recesión en la eurozona y que la tasa de desempleo está registrando un crecimiento sólido. Además, ha apuntado que la confianza del consumidor continúa apoyando al mercado inmobiliario.
S&P ha señalado que el exceso de oferta en vivienda está desapareciendo y que en el mercado inmobiliario hay cada vez más tensiones, pese a que existen diferencias regionales.
Así, ha recordado que un metro cuadrado en Madrid cuesta tres veces más que en Extremadura, región que experimentó un crecimiento negativo del precio en el primer trimestre. Los datos de Extremadura contrastan con el crecimiento de más del 8% registrado en la capital o del 6% en Cataluña.
S&P cree que el mercado laboral continuará apoyando el crecimiento del precio de la vivienda, aunque la creación del empleo debería ralentizarse.
Asimismo, ha señalado que aunque la inversión en construcción sea del 11% del PIB, la demanda debería impulsar a la baja la oferta de vivienda y sostener el crecimiento de los precios.
Por otro lado, considera que las hipotecas deberían estabilizarse en niveles históricamente bajos. “Esperamos que la inflación repuntará el próximo año, lo que ayudará a mantener bajas las tasas de interés reales y apoyará la demanda de vivienda”, ha añadido.
S&P espera que la demanda de viviendas se mantenga “fuerte” por las condiciones económicas favorables y los bajos tipos de interés, pero que se suavizará conforme empeore su asequibilidad.
Por ello, prevé que el crecimiento del precio de la vivienda continúe fuerte, aunque espera que este se desacelerará. También ha recordado que la encuesta de préstamos bancarios del Banco Central Europeo (BCE) muestra que los bancos esperan que la demanda de hipotecas se mantenga estable a finales de este año.
Además, ha afirmado que los bancos esperan endurecer las concesiones de crédito. También cree que la escasez de viviendas empeorará en algunas zonas de Madrid y que el crecimiento de los precios permanecerá por encima del promedio nacional.