El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado que el bono de 250 euros para jóvenes destinado al alquiler de vivienda es una política que “ha nacido para quedarse” y se ha mostrado convencido de que irá “expandiéndose” tanto en la cuantía como en número de beneficiarios.
En un acto con jóvenes en Alicante en el que ha explicado las medidas en materia de vivienda aprobadas en el Consejo de Ministros, ha destacado que el bono para el alquiler destinado a jóvenes entre 18 y 35 años que acrediten rentas bajas está dotado con 400 millones de euros para los próximos dos años, pero ha expresado su intención de que la medida continúe más allá del fin de la legislatura.
Asimismo, el presidente ha indicado que el paquete de medidas aprobado esta semana pretende adelantar la edad de emancipación de los jóvenes y construir “el quinto pilar del Estado de Bienestar” y que la vivienda sea un “derecho real” y no un problema para los jóvenes. En este punto ha mencionado que el 85% de los menores de 30 años sigue residiendo en el domicilio familiar.
Los jóvenes deciden qué hacer con el dinero
Sobre el bono del alquiler, Sánchez ha defendido que se trata de una innovación que “empodera a los jóvenes” ya que van a ser ellos quienes decidan “qué hacer con esos recursos”. Además, ha explicado que el Ejecutivo también aprobó el Plan Estatal de Vivienda 2022-2025 y una ley sobre la calidad de la arquitectura que busca la “dignificación” de las nuevas construcciones.
Además, se ha referido a la Ley de Vivienda, que el Gobierno pretendía aprobar esta semana pero tuvo que retrasar por no contar con el informe preceptivo del Consejo General del Poder Judicial, y ha señalado que “muy pronto” la sacarán adelante. A este respecto se ha mostrado sorprendido de que después de 40 años de democracia no exista una de ámbito estatal, que es “un derecho constitucional”.
El presidente ha detallado que el bono al alquiler se podrá complementar con otras ayudas directas contempladas en el Plan de Vivienda y que estas no podrán superar el 75% del alquiler.
Déficit en vivienda pública
También, que se incorpora la financiación de un seguro privado que va a dar cobertura a jóvenes y a familias vulnerables para garantizar el posible impago de hasta un año y “dar seguridad a los propietarios”, algo “fundamental” para mantener la oferta de alquiler e incentivar el mercado de la vivienda.
Además, ha mencionado que está previsto un incremento del parque público de vivienda de hasta 100.000 unidades que deben ser “asequibles” y de los cuales el 30% estará reservado para jóvenes de entre 18 y 35 años.
“Es uno de los principales déficits durante estos últimos años, o bien se ha desamortizado mucho patrimonio público o bien ha habido instituciones públicas que no han apostado por tener un patrimonio público en forma de viviendas”, ha apuntado.
Apela a la cogobernanza también en vivienda
Finalmente, Sánchez ha destacado que las políticas de vivienda son de “cogobernanza” porque la planificación urbanística está en manos de los ayuntamientos y los gobiernos autonómicos mientras que la labor del Ejecutivo central es fijar las prioridades y dotar de recursos. En este sentido la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez ya indicó este martes que los criterios definitivos para optar al bono de alquiler los deben fijar las comunidades autónomas.
A este respecto, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que acompañó a Sánchez en Alicante ha destacado la necesidad de cogobernanza en las políticas de vivienda y en la gestión de los fondos de recuperación. “Gracias a Europa tenemos la oportunidad de salir de esta pandemia terrible por la acción conjunta”, ha aseverado.
Puig ha pedido a los jóvenes que no caigan en el desánimo por no poder emanciparse, ya que “en ningún sitio está escrito que tengan que vivir peor que sus padres”. “Estáis liderando las grandes utopías del siglo XXI, situando las gafas violeta y la emergencia climática donde corresponde”, ha dicho, y ha resaltado las políticas actuales de vivienda frente a las anteriores del “pelotazo” urbanístico.