La contratación de oficinas en el primer semestre del año en Madrid y Barcelona creció un 47% y un 26%, hasta los 235.000 y 183.000 metros cuadrados, respectivamente, lo que supone recuperar los niveles anteriores a la pandemia.

Según los datos recabados por la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield, la renta ‘prime’ en la capital ha seguido subiendo en esta primera mitad del año, empujada por la nueva oferta entrante, que también se ha observado en otros submercados de la ciudad.

El 71% de la demanda se registró en edificios de calidad ‘A/B+’, confirmándose la tendencia de los últimos cuatro años. Madrid espera entregar 87.181 metros cuadrados antes de final de año, de los que el 25% ya está comprometido.

Por su parte, en Barcelona, las nuevas áreas y el centro de la ciudad siguen siendo las ubicaciones más demandadas por las compañías, concentrando el 35% de la demanda, en detrimento de las zonas periféricas.

Asimismo, el 73% de la demanda se ha cerrado en edificios de clase ‘A/B+’, superando el máximo del 63% del total registrado en 2019. Las rentas máximas se mantienen estables desde hace un año, situándose la renta prime en los 27.25 euros el metro cuadrados al mes.

Respecto a la oferta, los nuevos espacios entregados al mercado han empujado la tasa de disponibilidad hasta el 8,15% de oferta disponible en Barcelona, donde se espera entregar 274.000 metros cuadrados de oficinas antes del mes de diciembre, de los cuales el 35% ya está comprometido.