La Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) ha cifrado en más de 75.000 viviendas asequibles las necesidades de España cada año para posibilitar el acceso a la vivienda de las familias de rentas medias, adelantar la edad de emancipación de los jóvenes e incrementar la tasa de natalidad.
Para ello, la patronal aboga por un Pacto Nacional de Vivienda con una estrategia a largo plazo como una de las principales conclusiones de su informe ‘El problema de la vivienda sí tiene solución’, en el que realiza un análisis de la situación actual y del histórico de las políticas de vivienda implementadas en España, y propone cinco medidas claves a adoptar.
Estas propuestas pasan por cambiar las leyes de suelo para desvincular su desarrollo de suelo de la palabra especulación, aliviar la carga burocrática que tiene la producción de vivienda, recuperar los convenios con entidades financieras para incrementar la financiación mediante avales públicos, reducir la fiscalidad y fomentar la formación de trabajadores de la construcción para cubrir la falta de mano de obra.
Solo en 2022 se produjo un déficit de 120.000 viviendas en España, siendo el 18% de las transacciones de vivienda nueva, frente al 50% de la media de la serie histórica, al mismo tiempo que ha disminuido el peso de la vivienda asequible nueva, frente a la libre, que se encuentra por debajo del 10% del total durante los últimos años.
Así, la media en el periodo de 2014-2022 es de 8.300 viviendas asequibles al año, que contrasta con las cerca de 79.000 viviendas al año que, de media, se ponían a disposición de los jóvenes entre 1980 y 2010.
Otro dato que refleja el estudio es que el 46% de los jóvenes entre 25 y 34 años vive con sus padres, siendo España el país europeo que más ha empeorado esta ratio en los últimos 10 años. En concreto, 1.047.000 jóvenes con trabajo no se han emancipado.