Que nos hallamos en una era digital no es nuevo. A través de las nuevas tecnologías, la mayor parte de la población está interconectada y vivimos en una sociedad en la que Internet ha cambiado radicalmente cómo nos comunicamos. La globalización ha modificado también nuestros hábitos sociales y, en consecuencia, la forma en que las empresas trabajan e interactúan con sus clientes. Este cambio se ha producido en un periodo relativamente breve y solo aquellas compañías que se adapten a la trasformación digital podrán seguir existiendo.
Esta nueva situación afecta también al sector inmobiliario. Ante la amplia oferta disponible en Internet, nos encontramos ante un nuevo tipo de cliente, el “cliente digitalizado”, es decir, una persona ampliamente informada y exigente, que dispone de información en tiempo real, así como de una amplia oferta, lo que le dota de un mayor poder de comparación y decisión. Además, en los últimos meses hemos asistido a una leve recuperación del sector, y hemos visto cómo aumentaba el número de inmobiliarias existentes. La competencia, por tanto, es ahora mayor, y solo aquellos capaces de distinguirse y de ofrecer un servicio con un valor añadido pueden seguir captando nuevos clientes y ofrecerles una experiencia de compraventa satisfactoria.
Portales inmobiliarios y agencias inmobiliarias, protagonistas en el proceso
Los portales inmobiliarios se han convertido en la opción preferente para las personas que buscan piso, siendo ya el 65% de la población la que decide buscar una vivienda a través de esta modalidad, tal y como se desprende del estudio de fotocasa Etapas del proceso de compra de una vivienda. Este estudio pone de manifiesto, además, que los usuarios de los portales pasan una mayor parte del tiempo buscando su vivienda ideal a través de Internet, con lo cual cuando deciden contratar los servicios de un profesional, ya saben exactamente lo que quieren. Sin embargo, pese a ser clientes más informados, necesitan la ayuda de un profesional, ya que el volumen de ofertas puede sobrepasarle: en este caso, el exceso de información también puede causar desinformación e incluso, el caos.
Además de la vital ayuda de un profesional a la hora de escoger una vivienda, el estudio pone de manifiesto que tras la búsqueda activa en Internet, el cliente llega a una segunda etapa en la que necesita asesoramiento, ya que ni es experto ni se siente con la capacidad de valorar el “estado y valor” del producto. Necesita apoyo e información porque se siente inseguro.
El comprador de vivienda busca la ayuda de un profesional que ofrezca un valor añadido, una solución rápida y eficaz, y una dedicación total, en definitiva, un “agente inmobiliario digitalizado” que conozca las nuevas tendencias y responda a las necesidades de cada persona de una manera específica.
Es aquí cuando se hace necesario contar con recursos y formas de trabajar que permitan a los agentes inmobiliarios atender a sus clientes de una manera más personalizada. En este sentido, la adaptación al nuevo entorno, el conocimiento continuo de la evolución del precio de la vivienda, el uso de nuevas herramientas, la introducción de conceptos como el marketing inmobiliario y las nuevas tendencias en el sector, así como la consecuente formación continua de los profesionales, es crucial para entender las necesidades de los consumidores.
Los agentes inmobiliarios han de poder dedicarse en mayor parte a la captación y para ello necesitan herramientas que les ayuden a optimizar su tiempo y recursos para ser más eficientes.
Herramientas que permitan trabajar en cualquier momento y desde cualquier lugar, adaptadas a un entorno multidipositivo, mediante las que no haga falta cargar con documentos ni imprimir y, lo que es más importante, que permitan la firma digital, facilidades que ofrecen una gestión más rápida y una dedicación a clientes mucho más especializada. El trabajo del agente inmobiliario debe evolucionar de la misma manera que su entorno y hacer uso de la tecnología para ser más eficaz.
Esta solución digital la ofrecemos a nuestros clientes desde fotocasa, una empresa que cuenta con más de 17 años de experiencia en el sector y que se ha sabido adaptar siempre a los cambios gracias a búsqueda continua de la innovación. Además, fotocasa está respaldada por el expertise de Schibsted Media Group, empresa a la que pertenece, y un referente a nivel mundial en cuanto a últimas tecnologías se refiere.
En este sentido, la creación reciente de fotocasa academy, un foro de diálogo inmobiliario donde no solo ofrecemos formación sino que abrimos un espacio para el debate entre todos los profesionales del sector, es un ejemplo más de cómo fotocasa se adapta a sus clientes para ofrecerles toda la formación necesaria para afrontar los cambios de la era digital. Porque adaptarse al medio es la única manera de sobrevivir, confía en fotocasa para hacer crecer un negocio inmobiliario.