“El año 2025 va a ser la repetición del 2004”, con esta rotunda afirmación el economista Gonzalo Bernardos abrió la jornada del Fotocasa Pro Academy Day de Málaga, donde dio la charla “El regreso del boom inmobiliario” ante decenas de profesionales del sector inmobiliario.
El experto animó a los asistentes más veteranos a hacer memoria y a recordar el 2004 como el último año del gran boom inmobiliario, justo antes de que la burbuja explotase. Y es que, según Bernardos, este próximo periodo se van a dar unas condiciones muy parecidas que ofrecerán una gran ventana de oportunidad para el sector. Las causas, según el economista, son multifactoriales y van desde la alta ocupación y la llegada constante de población extranjera a nuestro país hasta el aumento de los precios de alquiler -en máximos históricos- y la bajada de los tipos de interés.
Aumento de la venta de vivienda usada
Respecto a las previsiones para 2025, Bernardos se mostró optimista y estima que el próximo año se venderán alrededor de 825.000 viviendas. Eso sí, la gran mayoría será vivienda usada llegando a superar la cifra de 700.000, un hecho inédito en la historia y que se debe a la falta de promociones de vivienda nueva. Por eso, el economista animó a los profesionales inmobiliarios a enfocar su esfuerzos en la captación: “Hay oferta de vivienda usada pero hay que hacer el trabajo de captar esas viviendas. Como receta del año que viene, olvídense de la venta porque se van a vender solas. Se tienen que dedicar a captar”.
Condiciones para el boom inmobiliario
Tras estas primeras perspectivas tan favorecedoras, Bernardos se dedicó a desgranar una a una las condiciones que se están cocinando para un boom inmobiliario espectacular, remarcando la situación económica favorable que vive el país en la actualidad.
Las ganas de comprar vivienda han ido a más
Desde junio de 2022 hasta septiembre del 2023 los tipos de interés se dispararon dejando a muchos compradores sin acceso a crédito. No obstante, Bernardos animó a mirar más allá de las estadísticas generales y centrarse en algunos detalles que ya marcaban una tendencia: “Si vemos el mercado inmobiliario en 2023 y analizo las ventas sin endeudamiento me doy cuenta de que las transacciones suben por lo que ya se veía que el fondo de mercado era muy bueno, que había mucha gente con ganas de comprar vivienda y en 2024 ha ido a mucho más”.
Alta ocupación y llegada de extranjeros
Uno de los puntos fuertes del auge de la demanda de viviendas es la situación de la ocupación y más concretamente aquella que concierne a trabajadores extranjeros. Hoy en día en España es fácil conseguir un empleo lo que favorece la posibilidad de adquirir una vivienda. También es un destino perfecto para trabajadores en remoto del norte de Europa que quieren instalarse en nuestro país.
Para Bernardos, este sector de la población va a tener un papel destacado en el mercado inmobiliario porque “más de 500.000 personas, si contamos doble nacionalidad y extranjeros, llegan a España a trabajar y esto indiscutiblemente va a generar necesidades de vivienda”. Además, si tenemos en cuenta la media de 2’5 personas por vivienda, exige la necesidad de 200.000 viviendas frente a las 79.000 nuevas que se prevén. Un déficit considerable que, de nuevo, se tendrá que compensar con la segunda mano.
Máximos históricos de precio de alquiler
Otra de las situaciones que influye, y mucho, al sector inmobiliario es el mercado del alquiler y es que, según Bernardos, se da una circunstancia que nunca antes se había dado: “Las 52 capitales de provincia tienen máximos históricos de precio de alquiler y en todas ellas sale más barata la cuota hipotecaria que pagar un alquiler”.
Además, a todo ello se suma que, a diferencia de 2007 cuando a partir de los 30 años la mayoría de las personas eran propietarios, hoy en día entre los 30 y 40, solo lo son un 50%. Por lo tanto, existe una enorme “demanda embalsada” que cuenta con un gran hándicap: “Nos encontramos con personas de 40 años sin ahorros, que es el gran problema para acceder a una vivienda”.
Bajada de tipos de interés y mejores hipotecas
El descenso de los tipos de interés es otra de las características que va a impulsar el boom inmobiliario del que habla Bernardos. El experto prevé que bajen hasta el 3% en diciembre y el 2’75% en enero lo que tendrá algunos efectos en distintos segmentos: “Cuando hay tipos de interés bajos fluye una demanda de clases medias bajas que no ha tenido la oportunidad y ahora la van a tener”.
Aún así, una idea que aportó en la charla es contar con la ayuda de brokers inmobiliarios para encontrar la mejor hipoteca posible, que puede llegar a ser hasta por debajo del 2% a tipo fijo a finales de año. Las opciones van a ser mucho más variadas y accesibles dado el cambio en los criterios de los préstamos hipotecarios por parte de los bancos. El papel de los agentes inmobiliarios es favorecer la compra de la vivienda manteniéndose informados, aconsejando a los clientes y facilitando su acceso a la hipoteca.
Los agentes inmobiliarios deben dar soluciones
Ante la falta de ahorros de esa demanda embalsada que quiere comprar pero no cuenta con ahorros, Bernardos anima a los agentes inmobiliarios a dar un paso al frente para proponer soluciones. “Cuando alguien venga y no le salgan las cuentas vamos a hacerle un traje a medida. “¿Puedes pagar la cuota hipotecaria? Sí pero no tengo ahorros”, pues busquemos esos ahorros”.
Entre las propuestas del economista destaca implicar a los padres vía distintas fórmulas como donaciones familiares, préstamos entre particulares o hipotecas conjuntas. “Hay que encontrar soluciones porque hay mucha gente que puede comprar una vivienda pero lo desconoce. Está pagando de alquiler una barbaridad pero el año que viene pagará aún más”.
“Lo que viene es extraordinario”
Las buenas condiciones de la economía española narradas por Bernardos son también otro pilar que invita al optimismo. “Estamos creciendo 5 veces más que la media de la zona euro y está derivado en gran medida de los efectos directos e indirectos del turismo”. Asimismo, el experto también señaló que, a diferencia del 2006, en la actualidad “España vive por debajo de las posibilidades, estamos ahorrando más que invirtiendo”. Por todo ello, hay razones para pensar que los próximos años serán óptimos dado que los fundamentos de la economía española son sólidos.
¿Hay peligro de una nueva burbuja?
La pregunta que, seguro, rondaba por la cabeza de alguno de los presentes fue respondida por Bernardos hacia el final de su intervención. “No va a haber burbuja porque hay margen, los bancos en 2023 han dado el 40% menos del crédito que el 2007 y los precios eran bastante más elevados. Los bancos no han hecho ninguna barbaridad y en este momento tienen más depósitos que créditos”.
Para terminar, Gonzalo Bernardos lanzó palabras de ánimo a los expertos inmobiliarios: “Aprovechen la oportunidad, trabajen duro y consigan unos réditos tremendos”.