Los activos criptográficos como bitcoin u otras monedas virtuales no representan un peligro inmediato para la estabilidad financiera debido a su todavía pequeña presencia y limitados vínculos con el resto del sector financiero, según la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde. Quien ha recomendado a los reguladores mantenerse “vigilantes”.
“Nuestra evaluación preliminar es que dada su pequeña presencia y sus limitados vínculos con el resto del sector financiero, los activos criptográficos no suponen un peligro inmediato“, señala Lagarde en un artículo publicado por la institución al referirse a las implicaciones de las ‘cryptos’ para la estabilidad financiera.
No obstante, la exministra francesa de Finanzas advierte de que los reguladores “deberían permanecer vigilantes”. Ya que tienen el potencial para magnificar los riesgos de un excesivo apalancamiento en la compraventa de activos. Y de incrementar la transmisión de perturbaciones económicas si llegaran a integrarse más en los productos financieros más populares.
Las criptomonedas, un desafío para los modelos de negocio actuales
Por otro lado, Lagarde señala que las criptomonedas y ‘fintech’ suponen un desafío para los modelos de negocio de bancos y otras entidades financieras en caso de que se produzca un cambio a gran escala desde las monedas emitidas por gobiernos hacia los activos criptográficos.
Asimismo, la francesa considera que los reguladores pueden encontrar más difícil velar por la estabilidad de un sistema financiero más difuso y descentralizado. Mientras los bancos centrales podrían tener más problemas para actuar como prestamista de último recurso en caso de crisis.
“En mi opinión, la revolución ‘fintech’ no eliminará la necesidad de contar con intermediarios de confianza. Como ‘brokers’ y banqueros”, subraya Lagarde. Expresando su confianza en que las aplicaciones descentralizadas contribuirán a diversificar el panorama financiero y mejorar el balance entre servicios centralizados y descentralizados. Resultando en un ecosistema que sea más eficiente y potencialmente más robusto.
De este modo, la directora del FMI apunta que comprender los riesgos para la estabilidad financiera relacionados con los activos criptográficos “es vital” para distinguir entre amenazas reales y temores infundados. “Es por eso que necesitamos una agenda reguladora que proteja de los riesgos sin desincentivar la innovación”, señala.
“Los vertiginosos giros de cripto activos como bitcoin invitan a comparaciones con la manía de los tulipanes que barrió Holanda en el siglo XVII. Y la reciente burbuja de las ‘puntocom'”, añade Lagarde. Advirtiendo de que “con más de 1.600 criptoactivos en circulación, parece inevitable que muchos no sobrevivan al proceso de destrucción creativa“.