No cabe duda de que la ubicación es uno de los factores clave en el precio de las viviendas en alquiler, y puede dar respuesta a las dificultades de emancipación de los jóvenes. Optar por un inmueble alejado del centro de las capitales pero bien comunicado podría ser una solución para mejorar la accesibilidad a la vivienda. Así lo explica Jesús Gil, CEO de Gilmar, a quien hemos entrevistado en SIMA sobre la situación del sector inmobiliario.
Fotocasa: Ante el incremento del 4,7% de los precios de alquiler, ¿qué medidas se deben tomar para la accesibilidad a la vivienda?
Jesús Gil: Depende mucho de la zona. Hay zonas en las que sí ha subido ese porcentaje e incluso más, pero hay zonas en las que no y en las que está mucho más bajo. La accesibilidad está relacionada desde mi punto de vista con la distancia. Es ridículo pensar que en la calle Serrano o en la Castellana tenga que haber viviendas de protección oficial o haya que controlar los precios. En los pueblos de la comunidad, cuanto más lejos, más barato. Tienes alquileres por 200 euros.
Fotocasa: ¿Cómo se podría ayudar a los jóvenes a emanciparse?
Jesús Gil: El transporte es algo muy importante. Hay vivienda muy barata en alquiler, pero no deben pretender que sea en el centro de la manzana de Madrid. Hay poblaciones a 30, 40 o 50 kilómetros muy bien comunicadas y regaladas de precio.
Fotocasa: ¿Qué papel tendrán la digitalización y la sostenibilidad en el sector inmobiliario?
Jesús Gil: Son dos apartados tremendamente importantes. En el ámbito de la digitalización nosotros hemos inaugurado el metaverso y estamos muy emocionados con eso. Se pueden visitar casas con o sin muebles, puedes hacer visitas virtuales… La tecnología despertó con fuerza en la pandemia y es increíble cómo está creciendo. La sostenibilidad, no solamente en el ámbito de la construcción sino en cualquier otro, cada vez cobra más sentido.
Fotocasa: ¿Cuáles son las claves que deben tener en cuenta los inmobiliarios para afrontar el 2022 y el 2023?
Jesús Gil: El sector se ha profesionalizado muchísimo, el nivel de los ejecutivos que se dedican a esto es muy digno. Cuando yo empecé, a tu hija no le dejabas que se casara con asesor inmobiliario y hoy casi representan un estrato social pujante, con fuerza, que gana dinero y es un sector muy bonito.