La compraventa de viviendas retrocedió un 32,4% el pasado mes de julio en relación al mismo mes de 2019, hasta sumar 32.654 operaciones. Es su mayor cifra desde el pasado mes de marzo, cuando se declaró la pandemia de la COVID-19.
No obstante, en términos mensuales (julio sobre junio), la compraventa se disparó un 20%, su mayor crecimiento en un mes de julio en al menos cinco años. Son datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Un retroceso en la compraventa de viviendas marcado por la crisis sanitaria
Con el retroceso interanual de julio, marcado por la crisis sanitaria, la compraventa encadena cinco meses consecutivos de tasas interanuales negativas. Lo hace después de haber caído en marzo un 18,6%, en abril un 39,2%, en mayo un 53,7% y en junio un 34,3%.
El descenso interanual en julio fue consecuencia del retroceso de las operaciones sobre viviendas usadas en un 34,9%, hasta 25.887 transacciones. También del recorte en un 21,2% en la compraventa de viviendas nuevas, hasta 6.767 operaciones.
El 89% de las viviendas transmitidas por compraventa en el séptimo mes del año fueron viviendas libres y el 11%, protegidas.
El dato de las viviendas libres bajó un 33,8% interanual en julio, hasta las 29.068 operaciones. La de protegidas descendió un 18,9%, sumando en total 3.586 operaciones.