CENTURY 21 ha cerrado el primer semestre de 2022 con una facturación de 13,79 M €, lo que supone un incremento casi del 21% respecto al mismo periodo de 2021(11,4 M €). Entre enero y junio de 2022, la compañía ha ejecutado un total de 4.352 transacciones inmobiliarias, un 26,3% superior al semestre de 2021. De estas transacciones, 1.030 corresponden a viviendas de alquiler y 3.322 a ventas de inmuebles. El precio medio de venta ha sido de 183.117 €, un 2,5% inferior con respecto al mismo periodo del año anterior (187.861 €).

En cuanto al valor de las transacciones de compraventa, la cifra se sitúa en 607.731.513 €, un 24,3% más que en el mismo periodo de 2021 (488.803.596 €).

La red CENTURY 21 cuenta actualmente en España con 82 oficinas y con 1.550 asesores inmobiliarios. En este sentido, la enseña se encuentra en un proceso activo de selección de empresarios y emprendedores para representar la marca CENTURY 21 en la provincia de Barcelona, Comunidad de Madrid, Provincia de Málaga, Canarias y Levante. De hecho, a lo largo de este segundo semestre, esperan abrir 10 nuevas oficinas CENTURY 21.

Principales mercados inversores

En este aspecto, cabe destacar el incremento en 4 puntos porcentuales del cliente internacional como principal inversor en el parqué nacional. Así, el 16% de las transacciones de compraventa realizadas durante el primer semestre de 2022 han venido del cliente extranjero, mientras que el 84% han sido realizadas por el cliente nacional. Asimismo, la firma consolida la tendencia con respecto a los principales mercados extranjeros inversores en España, siguiendo a la cabeza los americanos, seguidos de alemanes, franceses e ingleses.

Los mercados nacionales más activos siguen siendo la periferia y el extrarradio de las grandes ciudades. Según Ricardo Sousa, CEO de CENTURY21 España, esto “está relacionado con las subidas de tipos de interés que están reduciendo aún más el poder adquisitivo de los españoles. Esta situación está generando una presión aún mayor sobre la demanda en los segmentos medio y medio-bajo del mercado, obligando al segmento de población joven y a las familias a buscar viviendas en zonas que aún tienen la capacidad de proporcionar soluciones habitacionales a precios más asequibles ubicadas, en su mayoría en las afueras de las ciudades. Y esta tendencia, a su vez, contribuirá a limitar y a disminuir la demanda.”

Evolución del mercado en el segundo semestre del año

En cuanto a la tendencia del mercado prevista para la segunda parte del año, según Sousa “el sector inmobiliario se enfrenta a la falta de mano de obra y a la escasez y el aumento del precio de las materias primas para la construcción. A esto se le suman los ciclos de licencias y construcción que todavía son muy largos, retrasando la producción y entrega de viviendas nuevas ajustadas a las necesidades de los españoles al ritmo necesario y deseado”.