El panel de previsiones de la Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) ha mantenido en el 1,6% su previsión de crecimiento económico para este año, con unas predicciones que oscilan entre un máximo del 1,8% y un mínimo del 1,5%.
Lo que sí han modificado los panelistas es la composición del crecimiento del PIB, dado que han elevado dos décimas, hasta el 1,7%, su estimación de aumento de la demanda interna, mientras que han empeorado también dos décimas su pronóstico sobre la demanda externa, que restará una décima a la actividad económica.
Los panelistas, entre los que se encuentran BBVA Research, Caixabank, la Cámara de Comercio, Banco Santander o Analistas Financieros Internacionales, destacan que la desaceleración del PIB en 2020 respecto al crecimiento previsto para 2019 (1,9%) se produce en un contexto en el que los principales indicadores de coyuntura apuntan a una ralentización de la economía, tanto a nivel global como en la Unión Europea.
De esta forma, la mayoría de los expertos considera desfavorable el contexto exterior y anticipan que seguirá siéndolo en los próximos meses. No obstante, con respecto a la anterior valoración, aumentan las opiniones favorables acerca de la evolución probable del entorno exterior.
En cuanto al mercado laboral, los panelistas esperan una ralentización en el ritmo de creación de empleo, desde el 2,2% en 2019 al 1,4% este año, en consonancia con la evolución económica y sin cambios respecto al anterior panel. Así, la tasa de paro media anual bajará del 14,1% el año pasado al 13,5% este año, dos décimas más que lo previsto por los expertos en noviembre.
Sobre la evolución del déficit público, todos los expertos estiman que en 2019 el déficit fue superior al objetivo del 2% contemplado por el Gobierno, con una estimación del 2,4% al cierre del pasado año, mientras que para 2020 esperan un déficit del 2,2%, también por encima (cinco décimas) de lo estimado por el Ejecutivo en octubre pasado.
No obstante, los panelistas han realizado esta previsión de déficit a falta de concreción de las orientaciones presupuestarias del nuevo Gobierno y no han incluido en sus estimaciones ni las medidas de gasto ni las de ingreso anunciadas recientemente.