El mercado inmobiliario español ha sufrido un “pequeño varapalo” por la inestabilidad política y la nueva ley hipotecaria y ya “se vaticinan síntomas de agotamiento”, según se desprende de un análisis realizado por Deplace.
No obstante, la inmobiliaria online cree que, pese a que los datos de compraventas de vivienda mostraron un descenso en junio del 9% respecto al mismo periodo del año anterior, no hay que hacer una lectura “alarmante”.
“Tradicionalmente, junio y diciembre son meses en los que la compraventa de inmuebles desciende”, ha dejado claro. Por otro lado, ha destacado que diez años después de la burbuja inmobiliaria, la compraventa de viviendas atraviesa un momento “relativamente estable”.
De hecho, del análisis de la evolución de la compraventa de viviendas en España entre 2008 y 2014 se desprende que en España, en este periodo, se han vendido más de 5,7 millones de viviendas, 800.000 de ellas justo antes del estallido de la crisis.
Además, ha afirmado que la compraventa de viviendas en España ha vivido un aumento que se mantiene constante desde 2014. Los datos de compraventas registrados desde 2014, según Deplace, confirman que el aumento se mantiene constante y ha permitido recuperar valores de 2008, “aunque sin alcanzar los máximos históricos de 2007”.
Por regiones, aunque todas las comunidades autónomas presentan una evolución en la compraventa de viviendas, algunas lo hacen “más lentamente que otras”. De hecho, ha apuntado que destacan Galicia y Extremadura, como las regiones donde las compraventas de viviendas han evolucionado más despacio.
En el lado opuesto, se encuentra Andalucía, como la comunidad autónoma donde más viviendas se vendieron entre 2008 y 2018. De hecho, la comunidad andaluza registró un total de 1,1 millones de compraventas en este periodo.
También destacan Valencia, Cataluña y Madrid, que registraron compraventas que van desde las 832.000 compraventas hasta los 700.000 transacciones.